Mi transformación digital tuvo lugar en el siglo XXI, cuando trabajaba como redactora en un periódico online. El mundo de papel de los años 90 que conocí se derrumbó y dio lugar a una avalancha de nuevos términos, muchos de ellos en inglés, y nuevas técnicas para comunicarnos en Internet. No puedo negar que me sentía mareada, pero acepté el desafío con positivismo e, incluso, con cierto sentido del humor. Recordé el dicho: «si no puedes vencerlos, únete a ellos». Y así es como el mundo digital sacudió mi vida como un terremoto 2.0.
«Adaptarse a la transformación digital y sobrevivir, o atascarse en el mundo analógico y desaparecer: esa es la cuestión»
Un nuevo lector me estaba esperando al otro lado del monitor de la computadora y se suponía que debía cumplir con sus expectativas. Así que, apagué la lamparita analógica y comencé a coquetear con un universo prácticamente desconocido que, después de un corto tiempo, me pareció atractivo.
Aprendí a trabajar en una plataforma digital en la que tuve que resumir conceptos, usar titulares pegadizos, agregar enlaces, adjuntar multimedia a las noticias para hacerlas más sugerentes, y elegir las palabras clave perfectas para mejorar el ranking SEO. Soy una entusiasta de los cuentos cortos y eso me ayudó a escribir noticias de manera concisa, historias que viajarían rápidamente a través del ciberespacio y de los océanos para llegar a otros continentes.
Adaptarse a la transformación digital y sobrevivir, o atascarse en el mundo analógico y desaparecer: esa es la cuestión. Los conocidos como millenials, por ejemplo, son muy conscientes de estos hechos. Pertenecen a una generación de personas que revisan sus teléfonos celulares incluso durante los tiempos de sueño. El 24% de la población mundial son millenials y prefieren las compras en línea. Las empresas deben satisfacer sus necesidades y ofrecer productos personalizados, para captar la atención de este tipo de público.
Tarde o temprano, el cambio digital tendrá influencia sobre una sociedad que una vez siguió a un visionario como Aldous Huxley, autor de Brave New World (1932), una novela distópica ambientada en un mundo de tecnología reproductiva, ciudadanos modificados genéticamente y manipulación psicológica a través de las drogas. Hoy en día, la misma sociedad da la bienvenida a los avances tecnológicos como la inteligencia artificial, la impresión 3D, los teléfonos inteligentes y el big data.
Mi pasado analógico definitivamente se ha ido. Internet ha cambiado las reglas del juego y, como afirma el periodista Mark Briggs en su libro Periodismo 2.0, “debemos aprender las nuevas reglas y términos y motivarnos”. Ser más flexible y abierto al cambio y la capacitación son conceptos clave para sobrevivir en la ‘Era Digital’, sin renunciar a las experiencias anteriores.
No estoy tratando de deshacerme de los libros tradicionales, los discos de vinilo o los VHS. No pretendo convertirme tampoco en una influencer con muchos seguidores. Mi ambición es más simple: quiero ser una narradora capaz de convencer a sus lectores de que se necesita una transformación digital y de que está aquí para quedarse y hacer nuestra vida más fácil.
«Internet ha cambiado las reglas del juego»
Sin haberme hecho miembro del club de fans de ‘Black Mirror’ y, claro está, sin haberme insertado un teléfono móvil en la mano, como uno de los personajes de ‘Years and Years’, he dado pequeños pasos que van desterrando a aquella periodista analógica de la pesada máquina de escribir alemana. Además del ya casi prehistórico correo electrónico, me he apuntado a la lectura en el ebook, tengo una cuenta en Instagram, un blog, ahora una web y busco, como casi todos, algún que otro like en Facebook para cerrar con broche de oro mis días de recorrido por el ciberespacio.
Por: Belkys Rodríguez Blanco
Fotos: Ramón Rivero
Me llamo Belkys Rodríguez Blanco. Sí, un nombre muy parecido al de la reina de Saba, pero soy periodista. Me gradué en la Universidad de La Habana, en la era de la máquina de escribir alemana. Como el sentido común manda, me he reinventado en este fascinante mundo digital.
Escribo desde los once años y ahora soy una cuentacuentos que a veces se dedica al periodismo y, otras, a la literatura. Nací en Cuba, luego emigré a Islandia y ahora vivo en Gran Canaria. Estoy casada con un andaluz y tengo un hijo cubano-islandés. Me encantan los animales, la naturaleza y viajar. En resumen, soy una trotamundos que va contando historias entre islas.
Excelente testimonio … El mundo está a un clip . Tenemos y debemos aprender algo de los (Tiempos Modernos ) …película siempre actual…sin renunciar a leer un bien libro .?
Tienes todo la verdad, cada día tenemos que actualizarnos.
Felicitaciones por tu nueva compañía L&B , seguiré pendiente para el próximo relato.?????
Muchas gracias, Rosenda. Es un honor que nos visites. Un saludo.
Esperemos que el mundo siga siendo físico y no sea solo 0y1
Muchas gracias, Leticia y Joel, por dejar vuestras opiniones. Bienvenidos.